miércoles, 16 de febrero de 2011

Shannon y el vagon naranja

Si de una vez por todas entendiéramos el amor dejaríamos de llorar,
las piedras se volverían azúcar y el miedo de hacer y no hacer se iría por la coladera.

Y si Shannon hubiera seguido su corazón y no su miedo hubiera tenido dos hijos preciosos, uno de ojos azules y el otro de ojos castaños, ya que él al pie de una playa oaxaqueña le juraba amor, a ninguno de los dos les hacía falta más.

Los días pasaron y Shannon fue descubriendo que Alí era un cabrón. Antes de que ella llegara a la playa, él había estado coqueteando con las mujeres, las extranjeras eran sus preferidas, tenían una ingenuidad que él podía manipular muy a su conveniencia. Justo cuando su coqueteo estaba surgiendo efecto con una de esas guapas, Shannon llegó, bella entre bellas. Alí no tuvo tiempo de poner resistencia y antes de que ella le preguntara en inglés dónde podía poner su casa de campaña, él se había enamorado. El milagro sucedió, su pecho se abrió como la bóveda se abre al dinero, su alma y mente dejaron pasar a esa mujer y sus ojos dejaron de buscar extranjeras, amigos, cervezas, mota. Él eratotalmente para Shannon.

Yo también me hubiera enamorado de ella, tenía ojos azules y grandes, su piel blanca se enrojecía con el sol, era delgada y su trasero resaltaba con los trajes de baño, su cabello era largo, cubierto por una espesa maleza de rastas rubias, su nariz era estilo griego, perfecta. Shannon era perfecta para Alí, lo supe cuando los vi juntos en las fotos que me mostró, ella colgada de su brazo como una sirena y él con ese cabello rubio ondulado al aire, parecía que  levitaban en lugar de caminar.

"Y ésta es Shannon en el caballo"
"Aquí detrás de su instalación"
"Aquí estamos comiendo, ella me tomo la foto"

Después de mostrarme un par de fotos más Alí ensombreció, como cuando uno recuerda la llegada de una catástrofe con amargura, su ceño se frunció y sus ojos castaños comenzaron a enrojecer. Me levanté de la cama para preguntarle a Alí si algo andaba mal, él respondió que no y continuó su camino hacia el pasado.

"Cuando conocí a Shannon me la lleve a rolar por todo Oaxaca. Después viajamos a Canadá. De ahí nos fuimos a Francia, allá vivimos un tiempo, pero un día le llegó un mail en dónde mi última novia, Adil, le decía que yo la engañaba, le mostró fotos de un viaje que hicimos cuando eramos novios. Nuestra relación no volvió hacer igual. Shannon se alejó de mí, pero desde la primera vez que hicimos el amor en Oaxaca se alejó, tuvo miedo a enamorarse de mí, siempre lo tuvo. Cuando Adil la comenzó a mensajear mostrándole una parte de lo que había sido mi vida, Shannon decidió que yo era un cerdo de lo peor y encima se hizo casi amiga de Adil y yo en medio de todo. Con tanto espectáculo decidí irme a Marruecos, mientras, Shannon se regresó a Canadá. Adil no la dejó hasta que le dio los pretextos suficientes para fomentar su miedo hacia mí. Sannon no entendió que yo la amaba a ella y me hizo mucho daño. Después de mentarle la madre a Adil e intentar explicarle a Shannon quede fatigado de Marruecos y regresé a México. Volví a la playa dónde había conocido a Shannon un año antes. Afligido por mi amor un día decidí llamarle, me respondió un pendejo, me dijo bien pedo y en un inglés chafa que ella no quería estar más conmigo, que yo era un cerdo. ¿Cerdo yo?

Me había gastado mis últimas monedas para llamarle, había gastado mi tiempo en caminar hasta el pueblo para el encontrar el teléfono, todo para escuchar la voz de ese cerdo llamándome cerdo.

Volví a la enramada caminando y con el corazón roto. Después de eso el desmadre rico, el sabroseo, pero no dejaba de pensar en ella. La esperé todo lo que un hombre puede esperar, sabía que me amaba pero su miedo de salir herida en la relación la mantenía en Canadá, lejos de mí, sin contacto. Una semana después fui a la montaña en San José Oaxaca y decidido a romper ese vínculo. 

Escribí un mensaje de celular, culero, porque tenía que ser culero y titubé para enviárselo. Después de tres minutos oprimí "send" y en el mismo instante que yo le mandaba ese mensaje culero, ella me mandó un mail para decirme que me amaba y que se regresaba a México conmigo. El destino nos desencontró. No la volví a ver, luego me fui a la India. Si te cuento ésto es para que no tengas miedo de amar. Ama aunque puedas salir herida, si el miedo te acorrala rompe con él porque te puedes arrepentir mucho después. Ella aún vive arrepentida, lo sé"


Hoy estoy en el borde de la línea amarilla del metro, esa línea que impide que te acerques de más. Espero el metro del vagón naranja y esa historia viene a mí porque ahora la entiendo. Entiendo que no amar por miedo es la cosa más dolorosa y que no te amen por miedo o inseguridad es similar a ahogarte en el agua fría del Atlántico. Yo aún no me iré, sin embargo entiendo una historia que debí entender hace tiempo y mis ojos castaños tienen ese brillo rojizo, mi ser se torna sombrío y comienzo a llorar.

3 comentarios:

La guapa dijo...

Tal vez debí ponerle a ésta entrada "Me hicieron crack" je je, pero hubiera tenido que contar de una Shannon adicta y esa no era la historia, je je!

NTQVCA dijo...

¡Guapa! Que bonita y triste historia, la emana pasada alguien me dijo que ya sin miedo me aviente a hacer lo que debo hacer, tengo más que ganar que lo que podría perder.

La guapa dijo...

Sólo recuerda que el miedo no es amor. Desde mis adentros te digo que el miedo que puedas tener para hacer algo tuyo tampoco es reflejo del amor que puedas tenerte. Abrazo!